Activegreen

miércoles, 30 de abril de 2008

LAS CUATRO FORMAS DE USAR EL SOL


Energías Renovables

Biomasa
Se trata de aquella energía que somos capaces de extraer tanto de las plantas como del resto de la materia orgánica. Además de la leña, las plantas nos proporcionan combustible muy parecido al gasoil que podemos utilizar en los coches (biodiesel), alcohol que también sirve como combustible (bioalcohol) y gas que se quema tanto en las calderas de calefacción como en las que producen electricidad (biogas). Considerando todas las formas de uso de la biomasa, es la fuente de energía que más se consume en el mundo después del petróleo y es una esperanza para conseguir un combustible alternativo y ecológico a la gasolina para nuestros autos


Energía minihidráulica
La conversión de la energía que posee el agua que circula por ríos o canales y que se aprovecha a base de instalar una turbina directamente en el cauce, se conoce como conversión minihidráulica y se diferencia de la hidráulica en cuanto a que no necesita embalses. Son instalaciones pequeñas que no afectan a la ecología del río y pueden estar instaladas en lugares tradicionales como los molinos de agua.

Energía eólica
El viento lo genera el Sol al calentar unas zonas más que otras. El aire que está en contacto con los sitios que se ha calentado más tiende a subir y esa especie de vacío que se crea, se llena con el aire que está más próximo que se mueve horizontalmente creando el viento. Desde hace más de dos mil años el hombre ha sabido utilizar la fuerza del viento para mover los barcos y moler el grano o bombear agua en los molinos de viento. En la actualidad, los molinos de viento son capaces de producir electricidad de forma directa y en aquellos lugares donde hay mucho viento, estos molinos representan la forma más eficaz, barata y ecológica de producir grandes cantidades de electricidad: son los parques eólicos.

Energía solar
La llama da luz y calor pero mucho más calor que luz mientras que una bombilla da más luz que calor.
La radiación solar es también una mezcla en la que hay dos componentes que apreciamos a simple vista. La luz del día y el calor que sentimos cuando nos ponemos directamente al Sol. Otros componentes no son tan fáciles de distinguir pero también se utilizan. Las lámparas de rayos UVA que se utilizan para broncearse imitan uno de los componentes de los rayos solares. El que nos pone morenos. Al igual que nadie usa las bombillas para calentar la casa o las lámparas de rayos UVA para iluminar las casas, los equipos que hemos desarrollado para aprovechar el sol, sirven solo cuando utilizan la parte de la radiación solar con la que funcionan bien.

Si es una sorpresa ver la cantidad de posibilidades que existen para aprovechar las energías renovables, aún es mayor descubrir todo lo que podemos hacer convirtiendo la radiación solar.

martes, 29 de abril de 2008

NECESIDAD DE LA ENERGÍA


La energía solar acompaña a nuestro planeta desde el inicio de los tiempos y seguirá haciéndolo durante varios miles de millones de años más.
 
El hombre siempre ha utilizado, de una forma u otra, la energía que le llegaba del sol.

La utilización doméstica del calor comenzó con el dominio del fuego en las épocas prehistóricas, y se consolidó a partir de la invención de las máquinas térmicas a partir del siglo XVII .

Calor y trabajo son dos necesidades básicas en cualquier grupo humano. Para producirlos el hombre ha utilizado a lo largo de su historia, una gran variedad de recursos energéticos. Al principio de nuestra era, se producía por la combustión de leña, pasando con las primeras máquinas térmicas al empleo del carbón. Ya en la actualidad, los motores de combustión interna, turbinas, etc., utilizan profusamente derivados del petróleo.

Fue así como nuestra sociedad se fue haciendo extraordinariamente dependiente de los combustibles fósiles.

El extraordinario crecimiento de la población mundial y su economía, ha propiciado que sólo queden reservas de petróleo hasta la mitad del siglo actual.

Nosotros mismos somos los que estamos "colaborando" con el calentamiento global de nuestro hábitat al utilizar combustibles fósiles, permitir la contaminación industrial, entre otras, y la destrucción de bosques y tierras húmedas.

Por otro lado, el consumo masivo de hidrocarburos está produciendo ya alteraciones de la atmósfera a nivel mundial, así como de la llamada lluvia ácida.

Por lo tanto, es imperativo el desarrollo de nuevas alternativas energéticas.

El actual esquema de consumo energético simplemente no es sustentable, no puede mantenerse indefinidamente sin amenazar su propia existencia.

El sol es una fuente inagotable de recursos para el hombre. Provee una energía limpia, abundante y disponible en todo el planeta. Ello propicia un cambio de modelo energético basado en un consumo sostenible que satisfaga nuestras necesidades sin comprometer nuestro futuro.

Así mismo, el Sol es una fuente de energía capaz de satisfacer indefinidamente a muchas de nuestras necesidades energéticas, de hecho a todas, si pudiéramos o supiéramos adaptar nuestras necesidades a los recursos disponibles en nuestro alrededor. Resulta asombroso el hecho de que la más eficiente de las técnicas solares, la arquitectura solar pasiva, haya sido redescubierta innumerables veces, para volver a ser olvidada.

El Sol podría ser la fuente energética práctica y abundante de la que dependiera la civilización el día en que se agoten los actuales suministros de combustibles fósiles. Y quizás nos encontremos en el umbral de una perdurable y estable era solar. La historia ofrece numerosas lecciones que facilitarían esa deseable transición a una nueva era. Lo cierto es que los navíos romanos navegando por el Mediterráneo en busca de leña han sido sustituidos por los petroleros rumbo al Golfo Arábigo; su objetivo es el mismo. Mientras tanto el Sol todavía nos calienta, y seguirá calentando a las generaciones futuras después de que los pozos de gas y petróleo se hayan vaciado, y sea lo que sea de nuestra actual civilización.

Por ello lo más reseñable de la historia reside en aquellas características que propiciaron que los seres humanos se interesaran, fabricaran y emplearan técnicas solares y aquellas otras que propiciaron lo contrario.

ACTIVEGREEN quiere contribuir de forma activa al empleo de sistemas y aplicaciones solares en el Uruguay.


CALENTAMIENTO GLOBAL



El clima siempre ha variado, el problema del cambio climático es que en el último siglo el ritmo de estas variaciones se ha acelerado de manera anómala, a tal grado que afecta ya la vida planetaria. Existe una relación directa entre el calentamiento global o cambio climático y el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero provocado principalmente por las sociedades industrializadas, poniendo en riesgo el futuro de la humanidad.
 
El impacto medioambiental que provoca la producción y consumo de energía obtenida a través de la utilización de combustibles fósiles, genera grandes cantidades de gases nocivos, por lo que esta forma de obtención de energía es cara y dañina para el medio ambiente y , sobre todo, se agota.

Durante millones de años, el efecto invernadero natural mantuvo el clima de la Tierra a una temperatura media relativamente estable y permitía que se desarrollase la vida, un ciclo vital que se había mantenido en equilibrio. En pequeñas concentraciones, los gases de invernadero son necesarios para nuestra subsistencia, pero en mayores cantidades, la consecuencia principal del efecto invernadero es el calentamiento global de la atmósfera; sólo basta una leve modificación de la temperatura para que se rompa el delicado equilibrio de la naturaleza.

Si el desarrollo mundial, el crecimiento demográfico y el consumo energético basado en los combustibles fósiles, siguen aumentando al ritmo actual, antes del año 2050 las concentraciones de dióxido de carbono se habrán duplicado con respecto a las que había antes de la Revolución Industrial. Esto podría acarrear consecuencias funestas para la vida planetaria, rompiedo el equilibrio natural existente.  

No deja de ser tremendamente grave, porque en la medida que el planeta se calienta, los cascos polares se derriten, y al derretirse los casquetes polares, menor es la cantidad de calor que se refleja, lo que hace que la tierra se caliente aún más. 

Con esto, se evaporará más agua de los océanos, y en otros lados habrá lluvias torrenciales, inundaciones, vientos huracanados, sequías, olas de calor y heladas...entre otros desastres naturales. Además de todos los desastres nombrados, se podrían producir hambrunas y epidemias frecuentes en todos los países. También podrían derretirse témpanos, desaparecer flora y fauna, volverse desérticas las tierras de cultivo, estropearse arrecifes e inundarse islas, así como desaparecer gran parte del litoral, playas, etc. 

Nosotros mismos somos los que estamos "colaborando" con el calentamiento global de nuestro hábitat al utilizar combustibles fósiles, permitir la contaminación industrial, entre otras, y la destrucción de bosques y tierras húmedas.

Por ello, se han adoptado medidas que permiten la utilización de fuentes de energías limpias y no agotables, como las energías de fuentes alternativas y renovables, de ahí el nacimiento de ACTIVEGREEN (energias alternativas u otras energías para el hogar).